Vayamos a cumplir una fantasía compartida, quiero ser tu puta privada por una noche.
Un hotel, una habitación, un tubo en el centro, a su elección sonaba The Unforgiven. El se sentó en un banquillo junto a una pequeña mesa colocada en la habitación, esperaba un baile, yo nunca había hecho algo así, pero mi ropa comenzó a estorbar, tenia que acariciar un poco el tubo, dar unas vueltas y comenzar a quitarla, primero fue la blusa, seguida del pantalón que no colaboraba del todo (tenia que hacer un comentario ridículo), mi sostén cayó en sus manos, vi como lo apretaba hacia su olfato, mientras la música continuaba sonando y yo debía moverme para complacerlo, mi tanga cayó y estaba completamente desnuda, esperando por él y la música continuaba sonando.
Él se acercó, su ropa comenzó a caer al piso, se encontraba atrás de mi, yo me sostenía del tubo y él comenzó a penetrarme, agarro por unos momentos mis pechos y con fuerza atraía mis caderas hacia su sexo; pasamos a la cama, me colocó al principio en cuatro y continuó penetrándome, me llevó a la orilla de la cama, puso mis caderas en la orilla y el parado, sostenía mis piernas sobre sus hombros, me nalgueó fuerte, continuó penetrándome con fuerza, recuerdo que me hacia tener un orgasmo y justo cuando aun me recuperaba provocaba el siguiente y el siguiente, acariciaba con su pene mi clítoris y de nuevo me volvía a penetrar, estaba completamente mojada por todos los orgasmos, me hizo acabar dos veces si mal no recuerdo en esa posición con incontables orgasmos. Me subió de nuevo al centro de la cama, continúo penetrándome en cuatro y no pude evitar continuar mojándome, las piernas me temblaban, mis brazos ya no podían sostenerme y entonces su ritmo continuo hasta que logró acabar y una vez mas yo con él.
De nuevo en la mesa de la habitación, de frente, fumábamos un cigarro, yo aun no me recuperaba, mi cuerpo continuaba temblando, sus ojos puestos firmemente sobre mi y por primera vez no podía articular palabras, él bebía su cerveza, se veía tan sexy así pero algo estábamos haciendo mal, estábamos muy lejos.
Fuimos hacia la cama, me recosté sobre él, fumábamos otro cigarro, platicamos un rato y era momento de dejarnos llevar por nuestro deseo. Comencé a besar sus testículos, desde abajo y lentamente pasaba mi lengua mientras los mojaba, su pene comenzó a ponerse erecto, yo quería continuar besandolo, él no pudo resistir más, se abalanzó sobre mi, me penetro intensamente de nuevo, estaba muy excitado, acabó!.
Recobramos la cordura, era hora de terminar una noche de placer, nos vestimos y salimos del lugar.
Fui su puta, su puta de una noche o de un día o de un mes, no importa el tiempo pero he sido su puta durante 6 meses y podría continuar.
TAG
Recobramos la cordura, era hora de terminar una noche de placer, nos vestimos y salimos del lugar.
Fui su puta, su puta de una noche o de un día o de un mes, no importa el tiempo pero he sido su puta durante 6 meses y podría continuar.
TAG
Comentarios
Publicar un comentario