Ir al contenido principal

Una noche mas, la historia continúa.


El primer viernes del mes de diciembre estaba por terminar, nosotros teníamos ya nuestros propios planes y yo me sentía mas que ansiosa de poder salir de la oficina y quitarnos todo ese lío de fingir que solo somos amigos, las 5 de la tarde marcaba el reloj.

El tiempo ha pasado, nuestra vida ha cambiado, especialmente la de él, ahora ya no tenemos que ir a un hotel para amarnos, ahora en la medida de lo aceptable es libre, fue mas de un mes donde los problemas hicieron su presencia y aunque todo no está solucionado el tiempo es el único que irá colocando todo como debe de ser, por el momento seguimos juntos y he aquí el relato de nuestra ultimo recuerdo.

Nos dirigíamos en su carro por las calles de la ciudad nuevamente ¿al norte?, hicimos una parada en un supermercado, necesitábamos algunas cosas para su departamento entre ellas unas cervezas y los ingredientes para las micheladas, algo para picar, cigarrillos, cartas...Llegamos a su departamento y tras acomodar las cosas, él encendió su portátil y puso un poco de música para que entráramos en ambiente mientras yo preparaba nuestras respectivas bebidas, nos dirigimos a su habitación y mientras colocábamos todo lo que necesitábamos y nos fumábamos unos cigarrillos el juego inició. Comenzamos con las cartas, con cada partida perdida el perdedor debía de quitarse una prenda, estábamos frente a frente y comencé ganándole pero como todo digno "tramposo" y para ponerle un poco de sabor comenzó por la cadena, los zapatos, los calcetines, mi racha de suerte cambió y comencé a perder y entonces después de varias partidas él solo tenía puesto el pantalón que ansiaba quitar y yo la blusa y mi cachetero. Una partida más y perdí, pidió quitar mi blusa pero solo me dejo plantados unos besos  y continuamos, aun no se como pude aguantar tanto y no tirarme sobre él, pensándolo bien si lo hice pero me contuvo y seguimos jugando. Perdió él y tenia que quitarse el pantalón pero continuaba instalado en su papel de "tramposo" y se quitó el cincho, mi enfado creció y quería ganarle pero resulté perdiendo, me quede desnuda y él con el boxer puesto, cuando el pantalón cayó no me dejo besar su erección, era momento de iniciar la última partida pero nuestros ojos se encontraron y se incendiaron, se acercó a mi y comenzó a besarme, a tocar mis pechos, los agarro entre sus manos y mordió mis pezones, sobre su cama me encontraba abierta para él mientras me besaba y con rapidez se introdujo dentro de mí, comenzó a penetrarme al principio suave mientras sus penetraciones aumentaban, me sentía tan excitada, tan caliente, tan suya y viéndolo a los ojos recordando lo mucho que lo amo, tomándolo por el pelo, hizo que me viniera y comenzamos de nuevo, me levantó de la cama y me colocó en la posición del perrito, sobre mis piernas sentía correr las gotas de lo húmeda que estaba por él deseando más, comenzó a penetrarme nuevamente, primero suave, luego rápido, mis manos encajándose en las almohadas y mi excitación al punto de no poner mas, apreté mi vagina para contener el próximo orgasmo pero no pude, lo provocó tanto que terminamos corriéndonos los dos mientras nos desvanecíamos el uno en el otro, se quedó por unos instantes sobre mis nalgas hasta que recuperamos la consciencia. Nos dirigimos cada uno a la ducha a lavarnos, al regresar nos acurrucamos en sus sábanas por un momento, sentirme suya me hace ser feliz.

Nos abrazamos por un rato y nos damos unos cuantos besos pero yo sigo deseándolo y él lo sabe, le pido que me toque, que me masturbe para que tenga alguna memoria de como lo hago yo cuando él no está y lo necesito, comienza a tocarme con un dedo sobre mi clítoris que poco a poco comienza a bajar y lo hunde en mi vagina, estoy mojada y esperándolo, muerde mi pecho y se queda en el mientras continua tocándome y hace que me venga, el cuerpo me tiembla pero su excitación está lista y se introduce nuevamente en mi, es tan excitante sentirlo que vuelvo a encenderme y a desearlo mas y mas, beso su pene, está erecto y me siento sobre él, está cansado y paramos un momento.

Me quedo sobre sus piernas, besándolo, chupando su erección, primero despacio, jugueteo con mi lengua, le beso los testículos, regreso a su cabeza y la introduzco toda en mi boca, la meto y la saco, mi ritmo aumenta y después de varios movimientos consigo que tenga un orgasmo al que él se entrega y lentamente dejo su pene aun erecto y sensible. Descansamos un momento, luego de abrazarnos y platicar, las horas se han consumido (como siempre el tiempo siendo un hijueputa), tomo una ducha y a continuación él, mientras me arreglo él se prepara algo de comer. Después de 20 minutos estoy lista para salir, con una falda roja corta, una blusa de corsee que deja parte de mis pechos descubiertos y lista para gustarle, él como siempre está guapo. Al salir de su apartamento nos dirigimos a un bar para beber algo y bailar.

Después de unas horas, es hora de marcharnos, me encanta bailar con él, beber, en realidad me encanta hacer de todo a su lado, lo amo pero como toda princesa (solo por la hora pues) a la media noche se acaba el encanto y debo de regresar a mi casa, el camino es un poco silencioso, quizá porque a los dos nos invade la tristeza de dejarnos, ¡cuanto quisiera quedarme a su lado!. Llegamos a mi casa, nos despedimos con un beso, un abrazo, un te amo y una mirada que ruega por no separarnos.


Lo amo, quiero continuar a su lado el tiempo que sea permitido, que él quiera. Quiero ser feliz a su lado a pesar de todo pronostico. Una noche mas, un recuerdo mas en mi alma y con un TAG pendiente de grabar en mi piel.

TAG.











Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Debo decir que te admiro

Debo decir que te admiro. Pero hay una lucha dentro de mi que no sabe que es lo que mas admiro de ti... Puede que sea tu dedicación a las cosas que te gustan, ¿acaba de salir tu expresión que intenta levantar una ceja?, te he visto en tu trabajo, siempre demuestras que sabes lo que haces aunque puede que no sea cierto siempre, te admiro porque sabes imponerte sin tanto esfuerzo y siendo siempre un caballero. Admiro tu inteligencia para hacer las cosas o para aprender a hacerlas, esa curiosidad que traes de nacimiento. Admiro de ti esa forma en la que haces que los demás te necesiten, yo incluida en esa lista, sabes exponer tus ideas, sabes demostrar tu inteligencia sin caer en ser un engreído y nunca he visto que te moleste enseñarle a alguien a realizar las cosas (excepto que sean tres veces...o cuatro, pero aun así lo haces). Te admiro por tu personalidad, supongo que es la experiencia de los años que te ha hecho saber llevar las situaciones, también debemos incluir que admiro ...

A veces no hay títulos

Escribir sobre ti,el hombre que me tiene enamorada, quien puede hacerse de mi mirada con tan solo sentir su presencia, aunque a veces solo debo de observarte de reojo para no parecer muy indiscreta; tú, el hombre que me hace suya cuando quiere, quien me deleita con su compañía durante los días activos y me deja su recuerdo en los días pasivos, simplemente eres quien me hace imaginar cielos en mi infierno. Tu me haces falta en el día cuando estas lejos de mi vista y en la noche solo puedo apaciguar las ganas imaginando que estas allí a mi lado, se que eso nunca sucederá y  puedes estar tranquilo con saber que tengo los pies sobre la tierra y que hasta hoy he disfrutado los castillos en el aire que hemos construido, hay amores que están condenados a vivir en la sombra y el nuestro es uno de ellos.  A mi mente vienen los maravillosos momentos que he vivido a tu lado, no puedo evitar que un vidrio de lagrimas se pose en mis ojos resistiéndose a caer, no es de tristeza o a...

Nueva Etapa

Si, aquello que inició como una aventura "mi inalcanzable" ,  eso que era solo sexo, una aventura para ambos ha evolucionado y ahora estamos en el inicio de una nueva etapa que realmente inició hace tiempo.  Hemos aprendido que el amor no es poseer, pero a pesar de ello sentimos pertenecer. Sabemos que no es un capricho y lo valoramos antes que valorar lo que se pierde, nos sabemos amar con respeto, damos lo mejor de nosotros,  perdonamos cuando es necesario, y aprendimos a confiar, a dejar ser libre al otro y hemos llegado a sentir paz siempre que estamos juntos sin limitarnos a lo físico, hoy tal vez somos mejores personas. A su lado yo siento  ganas de tener mucho sexo desenfrenado, y al mismo tiempo quiero mimos, abrazos y saber que me quiere; a su lado yo he encontrado el equilibrio de mi vida, mi paz y mi apoyo.  Para nosotros ahora b asta una mirada para entendernos, una noche para encendernos, un par de copas para bebernos y un abrazo para so...