Si lo conocí hace poco y no creo que el nombre, una combinación de las letras del abecedario lo defina pero escribiré la definición que tengo sobre él.
Están a punto de ser cuatro meses desde que lo conocí, sinceramente el tiempo es solo una variable absurda en algunos casos que al principio de dichos meses no era nada importante entonces pasemos a lo importante.
Pienso que uno puede tener química con una persona en el trabajo, en los estudios, en x lugar del mundo donde vaya pero una cosa es tener química y otra cosa es si realmente una persona logra captar mi atención. En este punto de mi vida es difícil que un hombre llegue a causar algún impacto en mi, creo que todos suelen utilizar la misma estrategia de acercarse, pedir el whatsapp y si una les responde cordialmente comienzan a creerse el cuento de que esta ya está interesada, esa es una farsa que solo crean en su mente y ojalá su hipotálamo sea capaz de de desmentirles algún día no muy lejano. No suelen impresionarme con palabras, pero he tomado un poco de tiempo para hablar con él, al principio como bien dije solo fue una relación de trabajo-amistad, una buena persona inalcanzable para mí y en ese momento sin interés de que lo fuese.
El punto es que el tiempo, esa variable continuó su curso y continuamos hablando de temas varios, su vida, mi vida, cuestiones de trabajo y así llego una semana en la que se iba de viaje y fue en ese punto donde descubrí ese interés que estaba creando en mí, ¿lo extrañe? si lo hice, esperaba su regreso. ¿Cuándo iba yo a esperar a alguien? en hora buena no fue el "nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde".
En algún momento del historial del chat las platicas fueron indirectas o muy directas, en realidad yo nunca hubiese imaginado gustarle y no es por inseguridades mías solo lo pensaba así:
¿Que puede verle alguien como él a alguien como yo? y entonces intentaba filtrar el humo de mi mente y bajar las telas de araña, un día escribió que le gustaban mis ojos y entonces todo estaba claro.
sostenerle la mirada los últimos días ha sido casi imposible para mi, una cuestión de poder disimular
frente a la gente, frente a él mi gusto por él, pero llegó el día donde una circunstancia hizo que un dulce nos pudiera acercar y en esa milésima de segundo en la vida, en la que todo actúa mas rápido que el cerebro para analizar una situación ya analizada antes y hacerle mas caso a la razón que a otras cosas que interfieren llega ese momento donde un beso puede más, un beso que libera ganas que han surgido con el paso del tiempo, tiempo que ahora si importa.
la definición de él es básica para mi: Es un hombre interesante, seguro, sabe quien es, tiene una mirada profunda, un sonrisa con aires de picardía y unos labios que fácilmente se vuelven un vicio. ¿Quien es él?, en mi mundo eso no importa lo único importante para mi en este momento es saber como el tiempo va a conspirar para que yo pueda tener el gusto de compartir un dulce nuevamente con él o quien sabe si pueda a su lado experimentar nuevos sabores.
¿Hasta donde quiero llegar?, mi imaginación no tiene limites y mientras ninguno de los dos pasemos las barreras que separan un sentimiento carnal de un sentimiento que viene del corazón todo marchará como ambos se que queremos.
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