Te imagino sobre mi, besándome en los labios, el cuello y queriendo llegar a mis senos, tu lengua roza la orilla de mi sostén y mis ganas comienzas a explotar bajo la ropa mojada ya. Llegas a mi abdomen, a mi vientre, al estar allí subes tu mirada hacia mi, veo el brillo de tus ojos y hace que los míos se perviertan. Bajas y continuas bajando mas en mi cuerpo, recorriéndole con la lengua, haces algunas pausas para colocar tus labios en mi piel, continuas bajando, buscando el camino como una abeja a su panal o una hormiga a su hormiguero, al final todos tienen un agujero. En algún momento siento tu lengua húmeda pasar lentamente por mi clítoris, siento tus labios ahora en mis otros labios, siento tu lengua una vez mas entrando en mi abertura, en esa puerta de la que tu tienes la llave y me hace ir a otros mundos. Los escalofríos comienzan a recorrer todo mi cuerpo, comenzando por mis pezones que se muestran también con reacciones favorables para ti, en ese momento me entrego al deseo ...